jueves, 19 de julio de 2012

Los fabricantes de vehículos y Bosch centran en el ESP su primer Barómetro de Seguridad Vial y Medio

Sobreviraje sin ESP

Todos tenemos claro que la antigüedad del vehículo es un factor de la seguridad vial y que tenemos un parque automovilístico envejecido. Quizá por eso la Anfac y el grupo Bosch en España han creado el Barómetro de Seguridad Vial y Medio Ambiente, un instrumento que en los próximos meses describirá la situación del parque móvil español en estos dos aspectos.

El objetivo de este Barómetro es dar una métrica mensual para que los medios de comunicación, la clase política, la Administración y la sociedad en general tengan un mayor conocimiento sobre el estado de nuestro parque automovilístico, y este proyecto ya ha comenzado a dar sus frutos: en julio de 2012, el Barómetro de Seguridad Vial y Medio Ambiente se centra en la presencia del ESP en nuestros automóviles.

Según las conclusiones del este primer Barómetro, en 2011 el control electrónico de estabilidad estaba presente en el 91 % de los vehículos matriculados en España, un dato que está dentro de la tendencia que prevé para 2013 un 100 % en la implantación del ESP en coches nuevos. De hecho, en 2014 el ESP será obligatorio en todos los vehículos, así que la evolución es lógica:

Barómetro de Seguridad Vial y Medio Ambiente: ESP

De 1995 a 1999 se produce la primera etapa del ESP, con una muy baja presencia tanto en su disponibilidad como elemento de serie como opcional, siendo para la mayoría de las marcas y modelos comercializados un equipamiento aún no disponible. Ya del año 2000 a 2007 se produce un progresiva introducción del dispositivo en los turismos, pero no es hasta 2008 que el ESP se consolida como un estándar de seguridad más en los vehículos.

A partir de ese año, la presencia del ESP aumenta considerablemente en los turismos matriculados, especialmente como equipamiento de serie, duplicando en sólo 4 años la tasa de presencia alcanzada en toda la década anterior. Las razones incluyen el esfuerzo de los fabricantes por concienciar al usuario del uso de los sistemas de seguridad, y esto se retroalimenta con el interés de los nuevos compradores de vehículos de tener a su disposición un umbral mínimo de elementos de seguridad que, cada vez más, se dan por supuestos.

El lento ritmo de implantación que se observa encuentra un motivo en la complejidad tecnológica y en el elevado coste de desarrollo que exige un sistema como el ESP. Estos factores llevan a que el tiempo de maduración del sistema dure toda una década para luego dispararse su uso en los vehículos.

Distribución de la presencia del ESP

ESP, por segmentos de turismos

Por segmentos de turismos, sólo los de menor tamaño presentan una deficiencia en número de sistemas ESP instalados, debido al mayor peso de marcas de gama baja que no lo incluyen entre la dotación del vehículo. Algo así ocurre en el segmento de los todoterrenos, donde la falta de ESP se concentra sobre todo en los vehículos más pequeños o en los que resultan más adecuados para realizar tareas en el campo y también los de algunas marcas de gama baja.

Por comunidades autónomas, Madrid es la que presenta una mayor disponibilidad de ESP en los turismos nuevos, con una tasa del 93,2 % en 2011, seguida de Navarra (92,6 %), Aragón (91,6 %), País Vasco y Cataluña (ambas con un 91,3 %). El resto de comunidades presentan valores inferiores a la media nacional, del 91,1 %, y en la última posición destaca Baleares, con una disponibilidad inferior al 85 %. La elevada concentración de vehículos de alquiler con equipamientos básicos y la menor concienciación de conductores que sólo usan su coche para desplazamientos cortos podrían estar en la base de la situación en las Islas.

Foto | Raymond Spekking
En Circula Seguro | La antigüedad del vehículo influye en la seguridad vial, El parque de automóviles en la tercera edad, y cómo debería pintar su futuro








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Nissan LEAF, algunos usuarios reportan problemas con las baterías

Está claro que el futuro en el mundo de la automoción, pasa por los modelos híbridos y eléctricos. E incluso hay quién ya señala que ya existen modelos capaces de desenvolverse correctamente en el día a día. Lo que está claro es que marcas como Nissan apuestan fuertemente por un futuro eléctrico. Y uno de sus actuales máximos exponentes, es el LEAF. Y por lo visto, varios usuarios están experimentando problemas en sus actuales baterías, sobretodo en sitios como Phoenix, Arizona, en donde el tiempo es tan severo en estos mese del año, que influyen de manera muy negativa en dichas baterías. Y más concretamente, señalando que han perdido capacidad.

Como sabréis, no hace mucho tiempo ya hablamos de nuevos sistemas de refrigeración para las baterías, y de cómo las temperaturas externas pueden llegar a influir muy negativamente en el rendimiento de las baterías de los modelos eléctricos e híbridos. Y es que hay que recordar que el Nissan LEAF no utiliza un sistema de refrigeración por agua, lo que quizás haría que este modelo pudiera afrontar con mayor solvencia, el duro y seco calor que hace en estos meses en Arizona, EE.UU.. Un hecho que no ha pasado desapercibido para John Schilling, portavoz de Nissan para los EE.UU.:

Estamos advertidos de los problemas que afectan a nuestros actuales usuarios; estamos estudiando cada caso de forma individual.

Incluso el Director de Producto de Nissan para EE.UU., Mark Perry, ya reconoció hace poco en un vídeo que:

El calor es definitivamente un mal aliado para las baterías. Pero estoy hablando de un calor muy severo, entre los 55 y 60 grados Centígrados… por lo que no aparquéis vuestro LEAF (o cualquier otro vehículo eléctrico) donde tengamos entre 45 y 50 grados Centígrados. En condiciones normales, no deberíais experimentar ninguna anomalía.

Pero claro, estamos hablando de Phoenix, una ciudad situada en pleno desierto, y en el que en muchos meses las temperaturas superan los 40 grados. De todas formas, Nissan no considera que este hecho sea un problema, pero que "están investigando 5 problemas que han aparecido en Arizona". Y aun no sabemos si este hecho podría venir acompañado de una pérdida en la gestión de la temperatura térmica en los LEAF. Algo que esperan en la marca japonesa, que sea de forma puntual, ya que tal y como aseguró hace tiempo la marca nipona:

No necesitamos un sistema específico para la gestión térmica de las baterías en los EE.UU… actualmente contamos con un récord que dice que nuestras baterías pueden tener entre el 70 y el 80 % de capacidad, después de 10 años de uso.

De todas formas, Nissan ya comercializa el LEAF en España desde hace unos meses, durante estos meses, podréis experimentar si con el calor el rendimiento de las baterías se ve afectado o no. Aun así, Nissan garantiza que la potencia de salida de sus baterías es siempre idéntico, y la garantía no cubre su capacidad. Os dejamos con un vídeo explicativo.

CBS 5 - KPHO










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